Aunque podemos tener una muy magnifica vista aérea de la Ciudad de Machu Picchu, desde la cima de la montaña Huayna Picchu, hay cosas que solo podemos ver con tecnología actual, por medio de esta imagen satelital podemos ver en perspectiva la creación de ingenieros Incas que trabajaron de manera exclusiva para la vista de sus Dioses, donde el perímetro de la capital del Imperio Incaico, forma la silueta del ave más grande que habita los andes, el cóndor. Los dioses principales para la Civilización Inca, eran el sol, la luna, las estrellas y los animales como el cóndor, el puma y la serpiente.

Es ya bastante asombroso, como es que se construyó una Ciudad de piedra de tales proporciones en la parte más alta de una montaña inaccesible, sin haber descubierto la rueda y sin los medios de construcción y observación con los que contamos ahora.

Vista Satelital de Machu Picchu

El arquitecto Enrique Guzmán, hace más de 20 años, compró una pequeña replica a escala de Machu Picchu en el Museo de la Nación. Lo que pudo notar en ese momento, marcó la investigación que iniciaría años más tarde: “la Ciudad Inca tenía forma de ave”. Así empezó una simple indagación que luego sustentaría en su tesis de maestría para la Universidad Nacional de Ingeniería (UNI). Le fascino la forma en la que esta Ciudad Inca se arraiga a la montaña de Machu Picchu en el Valle del Vilcanota.

Fuera de darle un punto de vista arqueológico o histórico, le dio una mirada desde la arquitectura espacial, y la ocupación volumétrica. Comprobó aquello que imaginaba durante años, El perímetro original de la Ciudad Inca de Machu Picchu, tenía la forma de un ave, al parecer volando en dirección al Uña Huayna Picchu. Guzmán sostiene que la disposición de las estructuras, calles y plazas vistas en forma global están en dirección hacia este cerro. En la Cosmovisión Inca existen apus mayores y apus menores, los cuales conversan entre ellos. Por eso que la Ciudad está dirigida hacia el Uña Huayna Picchu, y este a su vez se encuentra en la misma línea que el Salkantay, el apu mayor.

Guzmán señala que analizando la ocupación volumétrica y la ocupación urbana, todas las ciudades se construyen con un punto al cual se encuentran orientadas y en el caso de Machu Picchu, se construyó con dirección al Uña Huayna Picchu. Pero el arquitecto menciona una interpretación distinta, del origen del nombre de la ciudad. Según él, Machu Picchu no significaría “montaña vieja”, sino “pájaro viejo”. Dice que la palabra “Picchu” vendría del quechua “pichiu”, que significa pájaro o ave, para esto se basa en el libro de Gramática y arte de la lengua general del Perú, de Fray Diego González Holguín de 1607.

Esta relación entre Machu Picchu y sus estructuras, ha sido estudiada también, por el investigador norteamericano Johan Reinhard. Él sostiene que Machu Picchu se encuentra exactamente al sur del nevado Salkantay, aunque no es posible divisarlo desde la Ciudad Inca. Tanto Reinhard como Guzmán creen que los cerros que rodean la Ciudad Inca, conversan con el apu Salkantay.

Guzmán postula además, que los incas, habían querido darle formas de animales a otras ciudades (como parte de su cosmovisión). Él ha analizado otra de las ciudades construidas por Pachacútec, Ollantaytambo. Cuya disposición general de edificaciones, espacios y andenes también tienen la forma de ave, además asegura que el ave fue uno de los animales predilectos del Inca.

No solo Machu Picchu tiene la forma de un animal sagrado para los Incas, una vista desde el espacio, nos permitiría ver que la capital Arqueológica de América y ombligo del mundo Cusco, tiene la una silueta en forma de Puma. El motivo de las formas que les habrían dado siempre han intrigado a los investigadores. A inicios de los 60, los arqueólogos Manuel Chávez Bayllón y John Rowe, señalaron que la Ciudad del Cusco tenía la forma de un puma agazapado en ataque. Idea sustentada, años después, por la historiadora María Rostworowski.

Pero no son los únicos, en Perú son increíbles las vistas desde del cielo, como las “Líneas de Nazca” que parecen estar hechas por extraterrestres, la pregunta es ¿cómo hicieron estas imágenes los Incas?, sin satélites, ni nada parecido; parecen ser obras de gente que ¿dominaba la gravedad?. Hasta el momento nadie tiene una idea clara, de cómo se hicieron las siluetas de estos animales, en territorios tan inaccesibles como la Montaña Machu Picchu, sin la ayuda de vistas satelitales u otro tipo de tecnología , que les permitiera ver desde el cielo y a gran escala.

Por Boleto Machu Picchu – Ultima actualización, 12-09-2015